Concepto.

 
Son aquellas conductas que los estudiantes practican regularmente, para incorporar saberes a su estructura cognitiva. Pueden ser buenos o malos, con consecuencias positivas o negativas, respectivamente, en sus resultados.

Se incorporan con la práctica continua, y luego se vuelven naturales. Como buenos hábitos podemos citar:

a. Cumplir horarios.

b. Establecer una metodología.

c. Diagramar el tiempo con que se cuenta.

d. Llevar un ritmo constante.

e. Mantener el orden en el material.

f. Estudiar en un lugar silencioso y cómodo.

g. Utilizar técnicas para aprender significativamente, como la de subrayado, cuadros sinópticos y comparativos o mapas conceptuales; repasar; exponer en voz alta lo aprendido; cotejar los apuntes de clase con los textos recomendados.

h. Releer si no se entiende.

i. Ayudarse con el diccionario para realizar la lectura comprensiva.

j. Pautar descansos cortos por cada hora de dedicación. Se van formando en forma progresiva ya que no se puede pretender que un alumno de entre seis y once años aplique técnicas complejas, pero sí que automatice el orden, la prolijidad o el manejo del tiempo.

k. La ayuda del maestro y la familia como guías para la incorporación de estos hábitos es fundamental.

Tener hábitos de estudio adecuados va a facilitarte mejorar tus notas escolares y aprender mejor.

Los hábitos de estudio más conocidos y utilizados por jóvenes son:

1. La planificación de horarios específicos para el estudio.

2. Realización de proyectos.

3. Estudio para exámenes.

4. Constancia con los horarios que se asignan a sí mismos.

5. Fijarse metas específicas y enfocadas en su progreso.

6. Trabajar primero por la asignación más difícil.

7. Realizar sus estudios y trabajos en lugares limpios, iluminados y ordenados.

8. Repasar notas.

1 comentario:

  1. La información que manejas en este apartado me parece muy adecuado para informar a los alumnos como las acciones que se realizan, si se ejercitan continuamente se vuelven hábitos. La información es pertinente no solo para estudiantes, también para padres de familia, porque son ellos quienes han de supervisar en casa el ejercicio de esas acciones si pretenden que sus hijos obtengan buenas notas y realmente aprendan.

    Lilia Huitròn Hernàndez.

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